Sobre los aliados
"‑¿Son alguna especie de guardianes? ‑pregunté. ‑No. No guardan nada. ‑¿Son cuidadores? ¿Nos están vigilando? ‑Son fuerzas, ni buenas ni malas; sólo fuerzas que un brujo aprende a ponerles rienda. ‑¿Son esos los aliados, don Juan? ‑Sí, son los aliados de un hombre de conocimiento. " "(...) Luego explicó que los aliados no podían tomar la iniciativa ni actuar directamente sobre nada; podían, sin embargo, actuar sobre el hombre en forma indirecta. Don Juan dijo que entrar en contacto con un aliado era peligroso porque el aliado podía sacar lo peor de una persona. El aprendizaje era largo y arduo, dijo, porque había que reducir al mínimo todo lo superfluo en la vida de uno, con el fin de soportar el impacto de tal encuentro. Don Juan dijo que su benefactor, la primera vez que entró en contacto con un aliado, fue impelido a quemarse y quedó lleno de cicatrices como si un puma lo hubiera mascado. En su propio caso, dijo, un aliado lo empujó a una pila de leña ardiendo,